La Illas en los Andes pueden ser entendidas como un concepto cósmico, energético y ritual. Sin embargo, como explica Milton Eyzaguirre, Illa es un término polisémico y es imposible atribuirle un significado único.
En la actualidad, esta denominación suele asociarse a objetos amuleto o talismanes. Últimamente, también surgieron muchas publicaciones asociando a las Illas con la celebración de Alasitas y sus miniaturas.
Pero las Illas, debido a sus antecedentes históricos y culturales, no admiten tal simplificación.
El valor de lo oculto
Territorialmente, las Illas son elementos muy arraigados en la región andina. Tanto en Bolivia y Perú, como en el norte argentino.
En términos históricos, en La crónica del Perú de Pedro Cieza de León (un documento de 1553) se menciona a las illas como “cuerpo del que fue bueno en la vida”. Esta referencia hace alusión a cultos mortuorios que eran muy comunes entre los incas.
Estos cadáveres eran sacados de sus sepulcros durante ciertas celebraciones. Un punto en común con otras culturas, e incluso celebraciones más contemporáneas, en las que los cadáveres o los cráneos son considerados Illas.
Además, como reflexiona Alejandro Mautino, este rito implica una acción clave para comprender el significado de las Illas: son elementos ocultos o guardados de gran valor que solo son visibilizados bajo ciertas circunstancias.
Pero esta no es solo una de las múltiples referencias a las Illas. Todos ellas desperdigadas en lexicones, crónicas y “documentos de extirpación (de idolatrías)” coloniales. Pese a la diversidad de registros, hay coincidencias en ciertos elementos.
Las Illas y algunas formas de entenderlas
Uno de los principales rasgos en común es que las Illas tienen que ver con objetos de gran valor, energía o misticismo. Más allá de su tamaño, su forma o el material del que estén hechas.
Asimismo, estos objetos suelen estar ocultos o están relacionados con aquello que no se puede ver. Esto también implica “aquello que desborda la normalidad”.
También se asocia a las illas con la luminosidad no solar, es decir, aquellos destellos o aquella iluminación que proviene de otras fuerzas como los rayos. De ahí que illa componga la palabra con la que se suele nombrar al rayo: Illapa.
Así, las Illas se podrían generalizar como objetos vinculados a la comprensión cosmológica de la vida y una suerte de revelación o vínculo mágico con ella.
Desde esta lectura metafísica, hay vertientes que hablan de Illa como “la luz primigenia del universo”. Siendo que todo sobre la tierra está impregnado por ella, con su fuerza y su energía.
Esta noción hace mucho sentido con celebraciones como las de Illa e Ispalla. En este caso se entiende Illa como “fuente, semilla, origen de todo lo animal”. Ispalla, en cambio, se corresponde con lo vegetal y mineral.
La fiesta de la Illa y la Ispalla se celebra el 21 de diciembre, “coincidiendo con la primera cosecha”. En esta celebración, las Illas son adornadas con lanas de colores y otros elementos, simulando su florecimiento.
Hiroyasu Tomoeda, citado por Junko Seto, dice que las Illas, como figuras zoomorfas en miniatura, “representan o encarnan la fuerza fecundativa llamada illa o enqa que proviene del mundo subterráneo”.
Estas representaciones y sus implicaciones ceremoniales son comunes entre quechuas y aymaras. También son parte de la cultura kallawaya y sus orígenes podrían remitirse hasta épocas prehispánicas con los tihuanacotas.
Las Illas como amuletos o talismanes
En términos más concretos, en especial desde la arqueología, las Illas son considerados pequeños amuletos que suelen ser utilizados con fines rituales. Estas Illas suelen ser pequeñas figuras de arcilla, piedra o metales preciosos, representando a animales andinos.
Por lo común, sus ceremonias están vinculadas a la abundancia y la fertilidad de la tierra. O a la reproducción de bienes agropecuarios fundamentales en la vida rural (como las cabezas de ganado).
Pero, para proveer, las Illas deben ser alimentadas adecuadamente a través de los rituales que le correspondes.
“… si no se realiza la fiesta, no aumentan los animales domésticos; y si no le entregan ofrendas, la illa podría comerse el corazón de los propietarios… ”
Hiroyasu Tomoeda
Según anota Ludovico Bertonio en su Vocabulario de la lengua aymara, para este pueblo indígena las illas son “qualquier cosa que vno guarda para provisión de su casa, como chuño, mayz, plata, ropa, y aun las joyas”.
Esto tiene mucho que ver con aquella noción de objetos con un gran valor y que permanecen ocultos o guardados.
Bertonio, además, añade el significado de “piedra bazzar grande que se halla dentro de las vicuñas o carneros”.
Las Illas y sus múltiples formas
Si bien las Illas pueden estar hechas de todo tipo de materiales, hay algunas que suelen ser más valoradas que otras. Por ejemplo, la piedra bezar o bezoar también recibe el nombre de Illa.
Este lito suele ser un cálculo biliar o renal que es encontrado en venados, llamas o vicuñas. Suele tener un color aceitunado.
“De todas estas piedras la más generalmente estimada; que gozaba de más grande consideración era el bezoar que extraían del estómago de los rumiantes, huanacus, llamas, vicuñas y entre otros. Veían en ellas la sustancia vital de la tierra, y las consideraban formadas por una afinidad natural de la vida elemental con la vida animal en el interior del ser viviente”
Rigoberto Paredes
Pese a que las miniaturas son las formas más comunes de las Illas, existen peñascos y otras formaciones rocosas que reciben esta consideración.
Habitualmente, son edificaciones, montañas o rocas gigantes sobre las que cayó un rayo. Es decir, lugares “tocados” por Illapa.
Una de las Illas más conocidas, aunque no por esta particularidad, es el nevado Illimani.
Fuentes
- Mautino, Alejandro. (2021). Memoria y representación de la Illa andina en los documentos de la colonia.
- Pillco, Marcio. (Sin especificar). Illas en la ritualidad andina a través del tiempo.
- Mignone, Pablo. (2015). Illas y Allicac. La capacocha del Llullaillaco y los mecanismos de ascenso social de los «Inkas de privilegio». Boletín del Museo Chileno de Arte Precolombino.
- Seto, Junko. (2016). La representación mediante la miniatura en rituales aymaras: en torno a la Alasita. Revista de Difusión cultural y científica de la Universidad La Salle en Bolivia.
- Eyzaguirre, Milton. (2017). Los rostros andinos de la muerte. Las ñatitas de mi vida. CIS.
- Fernández, Alicia. (Sin especificar). Un especial arte arqueológico: las illas o amuletos andinos. Espacio de Arte Nicasio Fernández Mar.
- Paredes, Rigoberto. (1936). Mitos, Supersticiones y supervivencias populares de Bolivia.
- Trigo, David; Baitzel, Sarah. (2022). La rebelión de los camélidos contra la humanidad: del sacrificador camélido Tiwanaku a los mitos y ritos coloniales y contemporáneos. Arqueoantropológicas.
- Delgado, Guillermo. (1996). Los litos andinos como memoria de lo sacro. Lienzo, Revista de la Universidad de Lima.
- Pino, Ana M. (ed.). (2017). Illas y mollos. La casa del corregidor.