Tanto la música como la literatura son fuentes esenciales de la creación artística. Su influencia mutua es innegable. Pero, ¿cómo fluye esta relación? ¿Hay fronteras entre ellas? Estas son las preguntas que acompañaron la mesa inaugural del V Encuentro Internacional de Narrativas de Santa Cruz.
¿Cómo interactúan la música y la literatura en la creación artística? ¿Qué fronteras hay cuando se trata del arte? Esas dos preguntas guiaron la conversación de la mesa «Música y Literatura» del V Encuentro Internacional de Narrativas. Esta sesión fue el encuentro inaugural de una serie de conversatorios que concluyó el reciente sábado.
Lxs escritorxs bolivianes Adhemar Manjón, Giovanni Bello y Lucía Carvalho fueron quienes debatieron sobre las fronteras de la música y literatura. La mesa fue moderada por José Andrés Sánchez.
Los soportes y «el goce»
Giovanni, que actualmente cursa un doctorado en Historia, abrió la conversación perfilando paralelismos entre la producción musical y la evolución de sus soportes en el paso del tiempo, con un fenómeno similar en la poesía.
Una transformación hecha para acercarse al oyente o al lector, a la intimidad de su hogar, a ser parte de un libro o álbum en el que cada poema y cada canción son elementos individuales y cada vez más independientes, al ritmo del avance tecnológico.
También nos habló de aquellos géneros, entre el periodismo y la literatura, que se acercan a la música pero no únicamente a sus acordes o mensajes, sino al “goce” de esta como un producto.
Para leer otro texto de Giovanni sobre música y cultura, puedes revisar este que le dedicó al trap y el reguetón.
Inspiración mutua
Lucía habló de la relación entre la literatura y la música como fuente de inspiración mutua.
Comentó que muchos artistas de la cultura pop actuales hacen trabajos musicales inspirados en obras literarias.
También recordó que hay escritores que se acercan a la creación musical como parte de una producción transmedia, que involucra sentimientos, pero también varios sentidos.
Además de ser poeta y publicista, Lucía coordina la plataforma de difusión cultural feminista Cyberelfa.
A propósito, dijo que algunas veces una canción ha sido el gatillo de una idea o sensación que se convirtió en escritura.
Si te interesa conocer más de ella, puedes revisar el perfil que publicamos hace algunas semanas.
La música acompaña
Una experiencia similar fue la que comentó Adhemar. Él deja ‘soundtracks’ en las hojas de sus libros y las historias de sus personajes.
“¿Dónde va el coro en un cuento? (…) ¿Hay estribillo en una novela?”, se cuestionó al remarcar que la música acompaña distintos tipos de textos literarios, pero especialmente a diferentes personas, personajes y escenarios.
“La música suena en una limosina de quinceañera y en cualquier línea de micro”, remarcó Adhemar.
Puedes leer la intervención completa de Adhemar aquí.